Haciendo uso de este medio de comunicación que es el Hereje, gran revista compuesta por simpáticos, creativos, divertidos y apuestos jóvenes veinteañeros, (uno de ellos soy yo) quienes amablemente me dieron la posibilidad de presentar una especie de reclamo contra los flaites, longies, cumas, choros pulentos que habitan esta ciudad que supuestamente se encuentra protegida por carabineros de chile (los Pacos).
Pero antes debo manifestar el por que de mi enfado contra estos engendros de mierda.
Yo gozaba de una vida libre de asaltos y no tenia miedo de caminar por las calles de mi ciudad, pero el invicto de toda una vida sin un percance como este se acabó
Era un fin de semana como cualquier otro, en el cual salí a un pub de mi comuna con mis mejores amigos a olvidar los problemas de la semana y celebrar la llegada de un nuevo integrante en mi familia. Todo iba bien, la vida seguía el mismo curso de siempre, en donde el alcohol, las mujeres y la noche daban rienda suelta a un fin de semana de ensueño y lujuria, las risas aumentaban mientras el reloj avanzaba y todo era la raja, hasta que con los ojos bien chascones decidimos regresar a nuestros dulces hogares a descansar nuestros cuerpos agotados y ya satisfechos de placer.

Tomamos el rumbo que nos llevaba a nuestras casas. Felices, cantando canciones infantiles, por que somos jóvenes con alma de niños (en realidad dando jugo), y mientras doblábamos la esquina y nuestras gargantas coreaban un tema llamado el dinosaurio anacleto, un auto negro lada Samara que para mi en ese momento no se veía nada sospechoso paro justo frente nosotros; y pensamos......un taxi!! viene llegando gente a su casa....pero nuestra sorpresa fue que al abrirse la puerta no bajó una persona que llegaba a su casa, sino que un pendejo como de 16 años flaite a cagarse con los pantalones por las rodillas se acerca con la media pistola nuevecita de paquete que llegaba a brillar como si le hubiesen pasado brasso y nos grita con estas palabras "Ya guachos pasen las moneas", y nosotros no por cobardes sino por que no somos giles le pasamos lo que teníamos en el bolsillo (hasta servilletas llenas de números de minas salieron) al final luca ochocientos fue la cantidad que se recaudo para esta noble causa que se llama cogoteo por angustia; pero eso no era todo, ya que un segundo individuo casi de la misma edad y facha también con una pistola se baja gritándonos "Las billeteras" y el que manejaba decía "los celulares"....yo pensé aquí nos tiramos........ y hasta la borrachera se nos pasó cuando el segundo loco se nos acerco pidiéndonos las billeteras, al que yo enfrenté diciéndole -déjame sacar los documentos que sea. Con las manos temblorosas abrí la billetera y me dispuse a sacar mi cedula de identidad mas conocida como el "carné", pero este loco me apuraba con frases como " apura loco o si no queris que saque el fierro" y tomé lo primero que encontré, y se llevo mi mugrienta y rota billetera que no tenia nada de valor solo recuerdos de amoríos y webadas varias más mi CI y se fueron raja en el auto. Al final yo me quede solo con la licencia de conducir en la mano mientras a mi camarada lo despojaron de todos sus documentos salvo el pase escolar, pero el que corrió mas suerte porque se salvó de andar bloqueando cuestiones en dicom y dejando constancia en los pacos fue mi otro compadre al que solo le robaron 200 pesos, lo que no justifica el susto y quedar con las piernas como jalea de nervios.

Al final los pacos llegaron y ni nos pescaron, ya que en esta wea no hay justicia, me imagino la pobre gente que le entran a robar a la casa; no puede ser que un pendejo ande con una pistola apuntando a medio mundo, ganándose la plata así de fácil, mientras uno se saca la mierda trabajando pa que te paguen un moco. pero todo esto nos pasa por no hacerle caso a don graff y creer que a uno nunca le va a pasar nada,.

Yo se que esta revista nunca la van a leer los giles que nos robaron (si es que saben leer) por que nunca va llegar a sus manos, pero igual quiero desahogarme diciéndoles !"·%%$·"!!/)/%/==?.
se despide indignadamente.

-EL ASALTADO